Rinoplastia

La cirugía de nariz o rinoplastia es el tratamiento de cirugía estética en el que se modifica la forma de la nariz, y a veces se realiza por motivos puramente estéticos y otras para mejorar la respiración. 

 

La parte de arriba de la nariz es hueso y la de abajo es cartílago, y en una rinoplastia se pueden modificar el hueso, el cartílago, la piel o las tres cosas, para modificar el tabique, la punta de la nariz o la anchura de la nariz.

¿Cuándo se realiza la rinoplastia?

  • Anomalías congénitas.
  • Deformidades causadas por lesiones.
  • Problemas respiratorios.
  • Aspectos estéticos.

¿Cómo se realiza la rinoplastia?

La forma de realizar la rinoplastia depende de la modificación que haya que hacer y de su complejidad, por lo que dependiendo de la operación podría realizarse solo con anestesia local o se podría necesitar anestesia general, y en ambos casos suele durar una o dos horas, aproximadamente.

 

Además, se puede realizar una rinoplastia abierta en la que la incisión se realiza en la zona media de la nariz para acceder más al hueso y al cartílago, o una rinoplastia cerrada en la que se accede a la nariz a través de las fosas nasales.

 

En ambos casos, una vez hecha la incisión, se procede a esculpir la zona deseada y a cerrar otra vez y se pone una férula de metal o plástico, o una escayola de yeso, para ayudar a mantener la nueva forma de la nariz.

El preoperatorio de la rinoplastia

El día de la cirugía, el paciente debe ir con al menos ocho horas de ayuno de comida y dos semanas sin tomar medicamentos como aspirinas, ibuprofenos y analgésicos. Y, si el paciente es fumador, deberá dejar de fumar dos semana antes de la rinoplastia, pues el tabaco disminuye la capacidad de cicatrización de la piel.

El postoperatorio de la rinoplastia

En las siguientes dos semanas a la rinoplastia es normal que se mantenga la hinchazón aunque estos síntomas se pueden combatir con analgésicos recetados por el cirujano. 

 

A la semana, aproximadamente, de la cirugía el cirujano procede a quitar la férula o escayola, y se recomienda el uso de sueros fisiológicos para mantener la higiene en la zona operada.

 

Además, para evitar el aumento de las probabilidades de hinchazón o sangrado, se recomienda tomar las siguientes precauciones:

 

      • Evitar ejercicios aeróbicos y trotar.
      • No sonarse la nariz.
      • Consumir alimentos con alto contenido en fibra.
      • Evitar ciertas expresiones faciales, como las risas fuertes.
      • Cepillarse los dientes suavemente para reducir el movimiento del labio superior.
      • Usar ropa que no se introduzca por la cabeza.